Un hospital es un espacio crítico que requiere rigurosos protocolos de limpieza y seguridad. Una zona crítica es aquella que está delimitada y requiere un cumplimiento continuo de las condiciones de diseño con mínima variabilidad, ya que allí se lleva a cabo el proceso más importante.
En esta rutina, la calidad y distribución del aire es de suma importancia, ya que el sistema de aire en los hospitales permite acondicionar, conducir y distribuir el aire dentro de un recinto creado para el cuidado de la salud humana; esto incluye conductos, difusores, etc.
El aire acondicionado en los hospitales ayuda al control de infecciones
La instalación de un sistema de aire acondicionado, filtrado y distribución en un hospital es fundamental, ya que el aire es el medio más común de transmisión de enfermedades causadas por microorganismos en el aire.
Por ejemplo, la temperatura de los quirófanos debe ser diferente a la de la sala de recuperación, ya que el aire del interior de los hospitales ayuda a controlar infecciones, bacterias y virus.
El cuidado de esto debe ser muy riguroso, especialmente en espacios que requieren un ambiente bacteriológicamente estéril, como un quirófano o área de recuperación.
Adicionalmente, el sistema de aire acondicionado debe brindar confort térmico a los pacientes y personal de la institución.
Requerimientos del sistema de aire en un hospital
El sistema debe ser capaz de lograr un alto nivel de rendimiento, como mantener temperaturas específicas y diferentes en varias áreas del hospital. Deben cumplir con los diversos niveles de humedad requeridos por los pacientes según su condición, así como contar con niveles de limpieza del aire y niveles de microorganismos. Tienen diferentes niveles de presión según el entorno, la habitación o el área y, lo más importante, deben poder resistir catástrofes.
Como apoyo a este sistema, debe existir un sistema de control del buen funcionamiento de los equipos, así como procedimientos adecuados de operación y mantenimiento debidamente documentados. Estos deben ser auditados periódicamente por personal capacitado.
Los requisitos de este sistema dependen de la actividad física a realizar y de la vestimenta que llevan los profesionales de la salud en ese espacio. Algunos de los factores que determinan la temperatura adecuada del espacio son:
- La temperatura y humedad del aire exterior.
- La temperatura y humedad en el interior del local.
- El equipamiento e iluminación con que cuente el espacio.
- Las condiciones del aire que se introduce son: temperatura, humedad, velocidad y distribución.
Otro aspecto a considerar en los hospitales es el sistema de filtrado, el cual debe tener la función de no permitir la proliferación de microorganismos; es decir, debe ser biostático, lo que significa que no es un medio adecuado para la reproducción.
Algunos de los filtros a utilizar son los siguientes:
- Filtro metálico: Su propósito es retener partículas grandes, como suciedad, papel y plástico. Además, sirve como antivaho, ayudando a eliminar el exceso de humedad.
- Filtros mecánicos tipo bolsa: Su uso es muy común en algunas aplicaciones debido a su ventaja de una enorme capacidad de retención de polvo. Se sugiere su uso en sistemas con grandes volúmenes de aire y velocidades constantes.
- Filtros tipo HEPA: Se utilizan para atrapar partículas muy finas, como algunos virus o partículas, con diferentes eficiencias, todas referidas a 0,3 micras.
- Filtros terminales: Se instalan en el interior de la habitación a acondicionar, como cuartos aislados inmunodeprimidos, donde la eficiencia es la principal característica.
Esperamos que esta información le haya resultado beneficiosa. Para más información, no dude en ponerse en contacto con nosotros a través de WhatsApp 722 468 91 42, correo electrónico alfonsoivan@ossian.family, o nuestra página web. Podemos brindarle asesoramiento y el mejor servicio.
